miércoles, 29 de octubre de 2008




He estado visitando blos y a veces olvido quién soy...


Amo los años dorados del cine, las delicias en blanco y negro, las comedias diradas de los cincuenta. Clarck Gable y Claudette Corbet en Sucedió una noche. tan limpia, tan clara, que a veces no tengo en cuenta que adoro el arte ordenado o buñueslta indistintamente.

martes, 21 de octubre de 2008

Gracias a La Verdad


Pierdo amigos un día tras otro, el experimento a los que les he sometido es doliente... Decir ciertas verdades molesta, y corres el riesgo de quedarte solo; o, sin embargo, aquellas personas que tenías en el baúl de tu mente, sorprendentemente, pasean deliberadamente de nuevo por esta mi Barcelona Fasshion Life.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me dio dos luceros que, cuando los abro,
perfecto distingo lo negro del blanco,
y en el alto cielo su fondo estrellado
y en las multitudes el hombre que yo amo.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado el oído que, en todo su ancho,
graba noche y día grillos y canarios;
martillos, turbinas, ladridos, chubascos,
y la voz tan tierna de mi bien amado.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado el sonido y el abecedario,
con él las palabras que pienso y declaro:
madre, amigo, hermano, y luz alumbrando
la ruta del alma del que estoy amando.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado la marcha de mis pies cansados;
con ellos anduve ciudades y charcos,
playas y desiertos, montañas y llanos,
y la casa tuya, tu calle y tu patio.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me dio el corazón que agita su marco
cuando miro el fruto del cerebro humano;
cuando miro el bueno tan lejos del malo,
cuando miro el fondo de tus ojos claros.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me ha dado la risa y me ha dado el llanto.
Así yo distingo dicha de quebranto,
los dos materiales que forman mi canto,
y el canto de ustedes que es el mismo canto
y el canto de todos, que es mi propio canto.

Gracias a los que no os habéis ido o habéis reentrado.

jueves, 16 de octubre de 2008

Carta

Ésta es una carta para tí, amado. Cuando vuelvas del mercado yo ya no estaré. Prepárate el zumo, hierve la leche, tuesta el pan y vuelve a la cama. No temas, no es una pesadilla. Simplemente he ido a recorrer el mundo que hay fuera de esta casa, porque soy demasiado feliz, querido. Quiero llevar por una vez el traje de la la infelicidad que viste a los demás. Lo nuestro es demasido sincero y mágico, tan lindo que se encienden los ojos de las almas que nos observan cuando hacemos el amor. Ésta que sigue será mi nueva dirección.
Te quiero, Mdm.

dirección: caseta del perro
ciudad: jardín